Discursos y proclamas
A los Españoles y Canarios
Simón Bolívar, brigadier de la unión, general
en jefe del ejército libertador de Venezuela.
A los Españoles y Canarios
Conducidas nuestras armas libertadoras por el
Ser Omnipotente, que protege la causa de la justicia y de la naturaleza, hemos
libertado todas las provincias de Occidente, batiendo cuatro ejércitos, que en
número de 6.000 hombres, oprimían a Mérida, Trujillo, Barinas y los pueblos
internos de Caracas.
Nuestro ejército de Oriente ha dado la libertad
a Cumaná, Barcelona, y todos los Llanos hasta Calabozo. No resta, pues, al
imperio de los tiranos más que el pequeño territorio comprendido entre Valencia
y Caracas, que ellos oprimen con extrema crueldad; pero que está cubierto de
millares de patriotas que conocen sus derechos, saben defenderlos, y morirán,
si es preciso, por la gloria de salvar a su Patria.
Un puñado de españoles y canarios, pretende
con demencia detener el veloz carro de nuestras victorias, guiado por la
fortuna, y sostenido por el valor divino de nuestros soldados granadinos y
venezolanos. Las bandas enemigas. desaparecen delante de nosotros, aun antes de
presentarnos, porque temen una espada exterminadora, que la justicia del Cielo
ha puesto en nuestras manos para vengar la humanidad, que tan vilipendiosamente
ha sido escarnecida en el suelo americano.
Nuestra benignidad, sin embargo, os convida
nuevamente, españoles y canarios, a gozar de la felicidad de existir entre
nosotros en paz y armonía, abandonad estas tristes reliquias del partido de
bandidos que infestaron a Venezuela, acaudillados por el pérfido Monteverde,
que os ha puesto en la crítica y desesperada situación de morir en el campo, o
en los cadalsos, perdiendo vuestras familias, vuestros hogares, y vuestras
propiedades. Si queréis vivir, no os queda otro recurso que pasaros a nuestro
ejército, o conspirar, directa, o indirectamente contra el intruso e inicuo
Gobierno Español; pero si permanecéis en la indiferencia sin tomar parte en el
restablecimiento de la
República de Venezuela, seréis privados de vuestras
propiedades; y sabed que cuantos españoles sirvan en las armas, y sean
prisioneros en el campo de batalla. serán sin remisión condenados a muerte.
Confiad en nuestras ofertas liberales, y temed
nuestras amenazas, porque ellas son infalibles. Todos los españoles y canarios
que se han presentado a nuestro ejército, han sido conservados en sus destinos,
y son tratados colmo americanos, asegurándoos que son dignos de este titulo, y
se portan con el valor y lealtad que caracterizan a los hijos de Colombia. Del
mismo modo, han sido recibidos con amistad y clemencia. todos aquellos
españoles, que han probado no ser desafectos a nuestro sistema, y se han
mantenido en inacción mientras los tiranos perseguían con el oprobio y la
muerte a los inocentes americanos.
Nuestras huestes no han menester de vuestros
auxilios para triunfar pero nuestra humanidad necesita de ejercerse en favor de
los hombres, aun siendo españoles, y se resiste a derramar la sangre humana,
que tan dolorosamente nos vemos obligados a verter al pie del árbol de la
libertad.
Por la última vez, españoles y canarios, oíd
la voz de la justicia y de la clemencia. Si preferís nuestra causa a la de los
tiranos, seréis perdonados, y disfrutaréis de vuestros bienes, vidas, y honor;
y si persistís en ser nuestros enemigos, alejáos de nuestro país, o preparaos a
morir,
Cuartel General de San Carlos, julio 28 de
1813. 3° de la
Independencia , 1° de la Guerra a Muerte.
SIMÓN BOLÍVAR.
Certifico.
Pedro Briceño Méndez,
Secretario.
Imprenta de Juan Baillo. Caracas.