SIMÓN BOLÍVAR: ENSAYO DE UNA INTERPRETACIÓN BIOGRÁFICA A TRAVÉS DE SUS DOCUMENTOS



SIMÓN BOLÍVAR: ENSAYO DE UNA
INTERPRETACIÓN BIOGRÁFICA A
TRAVÉS DE SUS DOCUMENTOS
Don Francisco Marín de Narváez fue hombre de fortuna, señor de las minas de Aroa y
de Cocorote y con derecho a nombrar y remover Justicias en esas localidades.
Don Francisco Marín de Narváez, en su testamento, advierte que tuvo una hija natural,
llamada Josefa (Josefa Marín de Narváez), "en doncella muy principal con la cual pudo
casar sin impedimento alguno y cuyo nombre calla por respeto y consideración al linaje a que pertenecía".
La madre de doña Josefa, al quedar embarazada, siguiendo la costumbre del tiempo,
debió separarse de la sociedad e ingresar a un Convento. Al nacer la niña jurídicamente
se debía ignorar quien era su madre. Ello no fue obstáculo para que la niña, doña
Josefa, fuese bautizada en la Catedral de Caracas como blanca, asentada su partida en
los libros de bautizos de blancos y apadrinada por personas "de calidad".
La ignorancia acerca de quién fue esa "doncella principal", madre de Josefa, hizo surgir
una pregunta: ¿acaso era negra? La respuesta no interesa, desde un punto de vista
meramente de valor, sino para una sola finalidad, el conocer la verdad. No tiene ninguna
importancia histórica que en la ascendencia de Bolívar haya habido o no personas de
raza negra, tal como hubo vascos o pudo haber gallegos.
Es extraño, sin embargo, que un historiador considerado "hombre liberal, tolerante, con
gran respeto a los hechos y a los demás", como justificadamente califica a Don Salvador
de Madariaga la nota que la Editorial Es pasa Calpe utiliza para presentar la tercera
edición de su biografía de Bolívar, hubiese dedicado muchos párrafos para crear en el
lector cierta duda acerca de la "raza" de doña Josefa Marín de Narváez hasta llegar a
decir, con el solo enunciado de la misma cita del Testamento de don Francisco, que "la
probabilidad de que esta doncella principal era oscura no puede ser mayor " (9).
Para el señor Madariaga la presencia de esas personas en una familia "tan ilustre como
la de Bolívar" tuvo sólo una causa, el dinero. La presencia de la partida de bautizo en el
Libro de Blancos, no le parece argumento poderoso pues en su opinión "el rico tenía
medios para hacer bautizar como blanco a cualquier niño pardo y aun para trasladar al
libro de los blancos al niño ya inscrito en el de color" (10).
El señor Madariaga no presenta prueba de sus afirmaciones. Como quiera que el editor
de su libro explica, en la misma nota de presentación ya mencionada, que el autor basa
sus consideraciones "en la importante documentación consultada y también, en esa
propia e increíble intuición tan suya... quizá es obligado concluir que, faltando en este
caso la "documentación" lo afirmado por el señor Madariaga es producto de la "intuición" del autor.
Sin embargo es necesario examinar el tema para no contraponer afirmaciones a otras
afirmaciones.
Quizá el origen de la confusión reside en haberse casado, real y efectivamente y en
forma legítima, un hermano de doña Josefa, llamado Pedro Domingo de Ponte Andrade
Montenegro y Marín de Narváez con una "negra de calidad" llamada María Lorenza.
En ese tiempo, procrear un hijo sin previo matrimonio era motivo de rechazo social,
mientras que casarse con mujer negra y tener con ella un hijo no estaba prohibido ni
resultaba extraño. La partida de nacimiento o de matrimonio, según el caso y con el
acuerdo del padre y esposo, hacía constar el hecho para dejar establecida la filiación de
los hijos.
De haber sido negra la madre de Josefa y dados los tratos de la época, el calificativo de
"doncella muy principal", que le dio don Francisco, era imposible que le hubiese
correspondido. Tampoco habría habido razón social para ocultar su nombre. Pero, al ser
de verdad, dentro de los mencionados modos del tiempo, "doncella muy principal"
merecía "respeto y consideración" y don Francisco calla su nombre y se limita a decir,
con el mínimo de dignidad posible, que con ella pudo haberse casado "sin impedimento
alguno".
Don Francisco Marín de Narváez, en su Testamento, nombró a su hija Josefa única y
universal heredera. Con esa calidad y a la muerte de su padre, resultó ser ella la dueña
de toda la fortuna familiar.
Hubo entonces tanto conflicto por la guarda de la niña Josefa que su tía, doña María
Marín de Narváez, monja concepcionista, la llevó a su Convento. Quizá en ese Convento estaba su madre. A la muerte de doña María se reanudó el pleito que culminó con la designación de don Pedro Jaspe de Montenegro como tutor.
Estando Josefa bajo esa tutoría casó, en 1681, con un sobrino de don Pedro, el ya
mencionado don Pedro de Ponte Andrade y Jaspe de Montenegro. De esa unión nació
Petronila de Ponte Andrade y Marín de Narváez la esposa de don Juan de Bolívar y
Martínez de Villegas. Es harto improbable que don Juan de Bolívar, hombre rico,
orgulloso y de conocida prosapia, solicitante del Marquesado de San Luis, se hubiese
casado con doña Petronila de haber sido ésta una mujer de condición social no similar a
la suya.
Como efecto de ese matrimonio, no como causa del mismo, llegó a la familia Bolívar
toda la fortuna de Marín de Narváez y entre esos bienes la casa en Caracas donde
después nació el Libertador, las minas de cobre de Cocorote y las de Aroa.
Fuente: SIMÓN BOLÍVAR: ENSAYO DE UNA
INTERPRETACIÓN BIOGRÁFICA A
TRAVÉS DE SUS DOCUMENTOS
Tomás Polanco Alcántara

Las más Hermosas cartas de Amor entre Manuela y Simón



Las más Hermosas cartas de Amor
entre Manuela y Simón
acompañadas de los
Diarios de Quito y Paita,
así como de otros documentos

Huamachuco, 16 de junio 1824
A S.E. El Libertador Simón Bolívar
Mi querido Simón,
Mi amado:
Las condiciones adversas que se presenten en el camino de la campaña que usted piensa realizar, no intimidan mi condición de mujer. Por el contrario, yo las reto. ¡Qué piensa usted de mí! Usted siempre me ha dicho que tengo más pantalones que cualquiera de sus oficiales, ¿o no? De corazón le digo: no tendrá usted más fiel compañera que yo y no saldrá de mis labios queja alguna que lo haga arrepentirse de la decisión de aceptarme.
¿Me lleva usted? Pues allá voy. Que no es condición temeraria esta, sino de valor y de amor a la independencia (no se sienta usted celoso)
Suya siempre,
Manuela Sáenz
Fuente: © Ministerio del Poder Popular del Despacho de la Presidencia
Las más hermosas cartas de Amor entre Manuela y Simón
Ediciones de la Presidencia de la República
Caracas - Venezuela, 2010
Depósito Legal: lf000000000000
ISBN: 000000000000

Bolívar y la Ilustración1 Rafael Morla.



Bolívar y la Ilustración1
Rafael Morla.
Universidad Autónoma de Santo Domingo
Bolívar conocía el pueblo americano, conocía sus vicios, su grandeza y sus
limitaciones. Hablaba de tres eslabones de la cadena que nos ata, son ellos, la
ignorancia, la tiranía y el vicio. “Por el engaño- dice Bolívar- se nos ha dominado más
que por la fuerza; y por el vicio se nos ha degradado más bien que por la superstición.
La esclavitud es hija de las tinieblas; un pueblo ignorante es un instrumento ciego de su
propia destrucción: la ambición, la intriga abusan de la incredulidad y de la
inexperiencia de los hombres ajenos de todo conocimiento político, económico o civil;
adoptan como realidades las que son puras ilusiones; toman la licencia por la libertad,
la traición por el patriotismo, la venganza por la justicia…Un pueblo pervertido si
alcanza su libertad muy pronto vuelve a perderla; porque en vano se esforzarán en
demostrar que la felicidad consiste en la práctica de la virtud: que el imperio de las leyes
es más poderoso que el de los tiranos, porque son más flexibles, y todo debe someterse
a su benéfico rigor: que las buenas costumbres, y no la fuerza, son las columnas de las
leyes, que el ejercicio de la justicia es el ejercicio de la libertad…Nuestros débiles
conciudadanos tendrán que robustecer su espíritu mucho antes que logren digerir el
saludable nutritivo de la libertad…”.2
El criollo, y Bolívar era uno de ellos, fue el sujeto principal de las luchas
emancipatorias en América, cuando sintió que había crecido lo suficiente se preguntó,
¿quién soy? En su representación, Bolívar contesta “…no somos europeos, no somos
indios, sino una especie media entre los aborígenes y los españoles…Jamás éramos
virreyes, ni gobernadores, sino por causa muy extraordinarias, arzobispo, y obispos
pocas veces, diplomáticos nunca, militares, solo en calidad de subalternos; nobles, sin
privilegios reales; no éramos en fin ni magistrados ni financistas, y casi ni aún
comerciantes: todo en contravención directa de nuestras instituciones”.3 El reclamo de
Bolívar era en contra de la exclusión social, exigía oportunidades para los excluidos
sociales.
Bolívar fue un ferviente admirador de las instituciones británicas, por eso
recomendaba a los legisladores de su tiempo estudiar la Constitución de Inglaterra, no
para imitarla servilmente, sino para ver lo que tenía de republicanismo. “Yo os
recomiendo esta constitución popular, la división y el equilibrio de los poderes, la
libertad civil, de cómo la más digna de servil de modelo a cuantos aspiran al goce de los
derechos del hombre y a toda la felicidad política que es compatible con nuestra frágil
-------------------------------------------------------------------
2 Simón Bolívar, Discurso ante el Congreso de Angostura, en Escritos Fundamentales, Editorial Monte Ávila, Venezuela, p. 61.
3 Simón Bolívar, Ob.cit., p. 37.
------------------------------------------------------------------
naturaleza”. 4 Todas estas ideas forman parte del proyecto político y social del libertador, y son al mismo tiempo partes medulares del programa ilustrado.
Fuente: Bolívar y la Ilustración1
Rafael Morla.
Universidad Autonoma de Santo Domingo

A Ñ O 1 5 N Ú M E R O 1 5 V E N E Z U E L A 1 8 2 5 , A Ñ O B I C E N T E N A R I O



A Ñ O 1 5 N Ú M E R O 1 5 V E N E Z U E L A 1 8 2 5 , A Ñ O B I C E N T E N A R I O
Leyes en beneficio
de pueblos originarios
El Libertador Simón Bolívar, en
medio de su exitoso recorrido por
los Andes suramericanos, sancionó
el 4 de julio en Lima un conjunto de
leyes destinadas a mejorar la calidad
de vida de los pueblos indígenas
que en la actualidad se encuentran
sumidos en la pobreza.
Haití
Francia reconoció
independencia haitiana
Haití se constituyó en la primera
República libre del Caribe. Obtuvo
su independencia en 1804, tras años
de luchas incesantes que llevaron a
la derrota del ejército invasor francés
y a la expulsión de los blancos
esclavistas. En el mes de julio, el
Gobierno de Francia la reconoció
finalmente como una nación libre a
cambio del pago de una deuda de
ciento cincuenta millones de francos.
Uruguay
Declarada libertad
de la Banda Oriental
El 25 de agosto de 1825 la Banda
Oriental declaró su indepedencia
del Imperio del Brasil y decidió la
anexión a las Provincias Unidas
de Río de la Plata por los vínculos
históricos y culturales que la unen
a estas. En Buenos Aires la noticia
causó gran alegría, pero no fue
aceptada por Brasil, que declaró la
guerra a las Provincias Unidas el 10
de diciembre.
Fuente: Gobierno Bolivariano de Venezuela
Comisión Presidencial para la Conmemoración del Bicentenario
de la Independencia de la República Bolivariana de Venezuela
www.bicentenario.gob.ve
COMITÉ EDITORIAL


SIMÓN BOLÍVAR: ENSAYO DE UNA
INTERPRETACIÓN BIOGRÁFICA A
TRAVÉS DE SUS DOCUMENTOS
Tomás Polanco Alcántara
Felipe, antes de la batalla, hizo a San Lorenzo la promesa de construir un Monasterio,
que llevaría su nombre, en el sitio llamado El Escorial.
En Santo Domingo, don Simón "el viejo" ejerció el cargo de Secretario de Cámara de la
Real Audiencia y casó con doña Ana Hernández de Castro "persona noble e igual a su
calidad" con quien procreó dos hijos, un varón, a quien llamaron Simón como su padre y una mujer de nombre Beatriz.
Hacia 1589 don Simón "el viejo" y su hijo don Simón, éste conocido como "el mozo" para distinguirlo de su padre, viajaron juntos de Santo Domingo a Caracas. En esos tiempos hubo un tráfico intenso de personas entre Santo Domingo y la tierra firme. No sabemos qué pasó con doña Ana Hernández de Castro pero sí que su hija doña Beatriz se quedó en Santo Domingo con la familia materna.
El Gobernador de la Provincia de Venezuela era don Diego de Osorio, hombre activo,
honesto, trabajador, autor y partidario de grandes reformas.
El viejo" don Simón, una vez en Caracas, se convirtió en persona importante para la
sociedad caraqueña. Ejerció el cargo de Regidor Perpetuo de la ciudad y más tarde, en
1590, el Cabildo de Caracas y el Gobernador Osorio, tomando en cuenta la experiencia
que había adquirido en Santo Domingo al servicio de la secretaría de la Audiencia, lo
designaron Procurador ante la Corte para que solicitara medidas de beneficio a la
Provincia. Creyeron que sería el personaje ideal para esos fines.
De nuevo "el viejo" don Simón atravesó el Atlántico, esta vez de ida y de vuelta. El año
de 1590 estaba en la Corte de los Reyes y pudo lograr, en beneficio de la Gobernación
de Venezuela, avances políticos y jurídicos, nuevas instituciones como el Seminario, el
escudo de armas de Caracas y otras reformas e innovaciones, que hicieron decir de él a
don José de Oviedo y Baños que "anduvo tan diligente o por mejor decir afortunado, que llegado a la Corte consiguió sin dificultad no sólo los principales puntos de su encargo pero muchas otras gracias "(3).
Don Simón "el viejo", ya anciano, fue injustamente humillado por el Gobernador Sancho de Alquiza, quien para cobrarle deudas de "Penas de Cámara", le embargó bienes y lo llevó a la cárcel.
Ese hombre representa, en la familia Bolívar y en la historia venezolana, el prototipo de
un personaje del Siglo XVI.
Caracas, desde 1592, se había convertido en la residencia del Obispo de Venezuela.
Don Simón, "el mozo", era Licenciado en Leyes. Ya instalado en Caracas se casó en
1592 con doña Beatriz Díaz de Moreno y de Rojas y con ella tuvo dos hijos, un hombre y una mujer, llamados don Antonio y doña Luisa. Comenzaba el Siglo
XVII.
Doña Beatriz Díaz de Moreno y de Rojas pertenecía a dos familias de raigambre en la
vida venezolana. Era hija de doña Ana de Rojas y de don Alonso Díaz de Moreno. Don
Alonso, hombre de reconocido valor, y quien, según Varios historiadores, fue el fundador de Valencia "ciudad que podría ser muy opulenta por las muchas conveniencias de que goza"(4); doña Ana era la hija de don Francisco Infante, uno de los fundadores de Caracas y de los primeros Regidores de la ciudad(5) y de doña Francisca de Rojas. Esta doña Francisca de Rojas fue la hija de don Diego Gómez de Ampuero y de otra doña Ana de Rojas, mujer excepcionalmente bella, "de gracia, resplandor y lumbre clara" según dice y seguramente dice bien, el cronista don Juan de Castellanos (6). La asesinó, en Margarita, Lope de Aguirre, "el Tirano", cuando ella trató de proteger a los que él perseguía. La Corona decidió recompensaría de una manera peculiar, otorgando a las mujeres de su descendencia el derecho de usar el apellido Rojas y no el apellido paterno (7).
Fuente: SIMÓN BOLÍVAR: ENSAYO DE UNA
INTERPRETACIÓN BIOGRÁFICA A
TRAVÉS DE SUS DOCUMENTOS
Tomás Polanco Alcántara
Obra suministrada

El Bolívar histórico que nos sirve de inspiración,



El Bolívar histórico que nos sirve de inspiración, y que orienta hoy el accionar
de millones de hombres y mujeres en Hispanoamérica, incluido el presidente Hugo
Chávez, conductor de la República Bolivariana de Venezuela, nació no el día que su
madre lo parió, sino aquel día del 15 de agosto de 1805, cuando juró, por el Dios de sus
padres, por su honor y por su patria no descansar hasta no acabar con el dominio
colonial español en América.
Simón Bolívar escribió miles de proclamas y cartas, desde los diferentes puntos
de América. Dos textos claves para entender las ideas ilustradas de Bolívar son la Carta
de Jamaica y el Manifiesto de Cartagena. Estos importantes documentos históricos son
atravesados como un hilo conductor por los conceptos de libertad, igualdad y justicia.
¿Cuáles son las consecuencias de ese reclamo de libertad, igualdad y justicia en unas
circunstancias donde existe la esclavitud? El que quiere ser libre es porque entiende que
ha alcanzado la mayoría de edad, y que no necesita la tutela de nadie para existir.
Recuérdese que Kant había definido la Ilustración como la salida del hombre de su
culpable minoría edad.
Ningún pueblo puede alcanzar la mayoría de edad atado a la cadena de la
esclavitud, es decir sin ser libre. Y para que las personas puedan ser libres, tienen que
ser iguales. De ahí que los principios de la libertad y la igualdad estén conectados entre
sí. Los ilustrados pensaban, y Bolívar recibió esta influencia, que todos los seres
humanos, sin importar su origen, su clase, su religión, su raza, nacían libres e iguales, y
que la sociedad los llenaba de cadenas. Llegar a esta comprensión es equivalente a un
rayo de luz. Después, solo se necesita conocer la sociedad en que se vive y ubicar los
eslabones que impiden la realización plena del ser humano, y desprenderlos.
Fuente: Bolívar y la Ilustración1
Rafael Morla.
Universidad Autónoma de Santo Domingo

SIMÓN BOLÍVAR: ENSAYO DE UNA INTERPRETACIÓN BIOGRÁFICA A TRAVÉS DE SUS DOCUMENTOS CAPITULO SEGUNDO



SIMÓN BOLÍVAR: ENSAYO DE UNA
INTERPRETACIÓN BIOGRÁFICA A
TRAVÉS DE SUS DOCUMENTOS
CAPITULO SEGUNDO
El Juego de los Abuelos
Es imposible tratar de entender a una persona sin conocer sus antecedentes familiares,
especialmente cuando han sido de cierta relevancia e influencia en el medio. En esos
antecedentes se encontrará mucho de lo que, de una manera u otra, se muestra en la
personalidad que se estudia.
Cada uno de los ascendientes, con su propio carácter, costumbres, fortuna, cultura,
modo de actuar, relaciones sociales, profesión y maneras de ser, al mezclarse con los
demás, mediante sucesivas uniones, contribuye a la creación de una carga familiar que
modela y en cierto modo condiciona, desde luego que en formas diferentes, a todos
aquellos que resultarán de ese largo proceso.
Hay que procurar entender a esas personas y examinar sus relaciones, situación y
contactos para poder llegar lo más cerca posible a un determinado ser humano que
descienda de ellas. No basta la simple información genealógica, entendida como una
lista, en orden cronológico, de fechas y de nombres. Debe irse más allá.
Trataremos de aproximarnos a Simón Bolívar por el camino de, previamente, pretender
conocer a sus antecesores (1).
Cuando no estaban en uso los asientos o partidas de nacimiento o bautismo, que el
Concilio de Trento ordenó que fuesen extendidos al nacer un niño y ser bautizado en
una Parroquia, los nombres y especialmente los apellidos que usaban las personas casi
siempre eran una descripción de su oficio y del lugar de residencia.
Don Miguel Ochoa de la Rementería y Bolívar-Jáuregui, séptimo abuelo paterno de
Simón Bolívar y el más lejano ascendiente directo que en esa vía se le conoce, aparece
con el nombre de Miguel, seguramente a modo de homenaje al Arcángel y se le
identifica como un hombre con apariencia de oso, herrero de profesión y cuyo
establecimiento se encontraba en cierta pradera donde funcionaba un molino. Esa
descripción resulta del conjunto de las palabras vascas que forman sus nombres y
apellidos.
Don Miguel fue padre de don Martín y éste del llamado don Simón de Bolívar "el viejo
quien, por su origen vasco, es conocido también como "el Vizcaíno."
Don Simón, "el viejo", fue el primero de la familia que recorrió "los caminos del Atlántico" pues, a mediados del siglo XVI, dejó las tierras vascongadas y se trasladó a América para aposentarse en Santo Domingo. Era uno de los muchos que buscaban en las tierras de América una vida distinta. ¿Acaso lo hizo emigrar el cambio de actividades agrícolas a industriales que entonces se estaba operando en su zona natal? Algo de ello se desprende de insinuaciones que se encuentran en los expedientes de hidalguía que el mismo don Simón de Bolívar "el viejo", hizo levantar en 1574 y que contienen el testimonio de quienes fueron sus vecinos(2).
Poco antes de partir don Simón "el viejo" hacia América, el Emperador don Carlos V
acababa de abdicar el trono español en su hijo Felipe II. Durante ese año de 1556 murió
Ignacio de Loyola y ocurrieron tanto el combate político y militar entre España y el
Papado por el control de los territorios de la península italiana como la guerra entre
Felipe II y Francia que culminó con el triunfo español en la Batalla de San Quintín.
Fuente: SIMÓN BOLÍVAR: ENSAYO DE UNA
INTERPRETACIÓN BIOGRÁFICA A
TRAVÉS DE SUS DOCUMENTOS
Tomás Polanco Alcántara

sin fecha General Simón Bolívar Muy señor mío

 /sin fecha General Simón Bolívar Muy señor mío: Mi genio, mi Simón, amor mío, amor intenso y despiadado. Sólo por la gracia de encontrarnos...